El calzado de seguridad es una de las partes más importantes del equipo de protección individual. Este calzado debe cumplir la normativa EN ISO 20345 para responder las exigencias de cada tipo de trabajo y su uso está regulado por la Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales.

Son muchos los trabajos en los que pueden darse posibles riesgos para la integridad del trabajador como golpes, aplastamientos, cortes… Por este motivo el calzado de seguridad se considera un equipo de protección individual imprescindible. Existen diferentes tipos de calzado de seguridad, pero sin duda los más comunes y más recomendados son el calzado S1P y el S3 (Hebe GT11 de Mendi ).

Te invitamos a conocer las características y las diferencias entre ambos tipos de calzado.

Calzado de seguridad S1P

El calzado de seguridad S1P es el modelo de calzado de seguridad más utilizado en todo el mundo. Esto se debe a que se trata del calzado que reúne todos los requisitos mínimos de seguridad. El modelo es una versión mejorada del calzado S1 y el SB, los modelos de calzado más básicos.

Respecto a las características a destacar del modelo S1P debemos comenzar por las más importantes. Este modelo cuenta con una puntera de seguridad que absorbe los impactos, además de tener en su interior una plantilla de seguridad antiperforación que protege la planta del pie. Como ejemplo de este tipo de calzado tenemos los zapatos de seguridad Security Line RUBI S1P  un modelo que además, tiene el talón cerrado.

También tiene cualidades antiestáticas y absorbe la energía producida en la zona del talón, tanto por la pisada como por impactos. Por último, en cuanto a los materiales, el calzado de seguridad modelo S1P puede fabricarse en piel plena flor, piel nobuck, piel  afelpada, cuero Split o microfibra.

Este calzado S1P está indicado para realizar trabajos en espacios cerrados y en los que sea necesaria protección frente a objetos puntiagudos y una buena transpiración.

Materiales en que se pueden fabricar tambien habría que añadir el calzado S1P también puede fabricarse en material textil.

Calzado de seguridad S3

El calzado de seguridad S3 también es uno de los más utilizados en los equipos de protección individual. A diferencia del calzado S1P, este modelo incorpora una película hidrorrepelente en el tejido, aunque no puede considerarse completamente un calzado impermeable. Su función es repeler el agua y aislar de la humedad al pie.

Esta protección frente a la humedad, a pesar de las ventajas que supone para el usuario, también supone un cierto inconveniente. Y es que esta película hidrorrepelente hace que el calzado sea menos transpirable que el S1P.

Al igual que ocurre en el modelo S1P, el calzado de seguridad S3 cuenta con puntera de seguridad, así como con plantilla antiperforación para mantener el pie a salvo de posibles accidentes.

Este calzado de seguridad S3 incorpora resaltes en la suela, de manera que el usuario tenga un mejor agarre cuando pise terrenos irregulares. También hay que destacar que el calzado S3 protege el pie de forma efectiva frente a las bajas temperaturas.

La suma de estas características convierte al S3 en un calzado apto para trabajar en zonas con agua (charcos, lugares húmedos…), así como en ámbitos como la construcción o el trabajo de campo gracias al agarre eficiente que ofrece su suela con resaltes.

El zapato de seguridad Forli Nevada S3 ESD es un buen ejemplo de este tipo de calzado.

¿Cuándo utilizar calzado de seguridad S1P?

Dada la protección que ofrece el calzado de seguridad con normativa S1P podemos decir, de manera general, que está indicado para trabajar en ambientes secos y que necesiten protección tanto en la puntera como en la plantilla (recordemos que tiene una plantilla antiperforación).

Gracias a la protección que brinda al pie podemos decir que está recomendado para cualquier actividad laboral que conlleve riesgo de aplastamiento o perforación. Por este motivo es posible ver este tipo de calzado en entornos industriales como el de la metalurgia, la carpintería y artesanía de la madera, la construcción, la fontanería, los almacenes logísticos…

¿Cuándo utilizar calzado de seguridad S3?

El calzado de seguridad S3 está indicado para trabajar en el exterior, ya que cuenta con mayor protección frente a riesgos externos que el S1P. Esto lo hace ideal para trabajar en lugares muy húmedos o con posibilidad de daño químico, mecánico, eléctrico o térmico.

Este calzado ofrece un nivel alto de seguridad, ya que resiste hasta los 200 julios, los aceites e hidrocarburos, tiene propiedades antiestáticas, absorbe la energía y el agua en la parte superior, aunque no son completamente impermeables.

Teniendo en cuenta las características ya mencionadas podemos concluir que pueden utilizarse para sectores como la construcción, la agricultura, la minería o las fábricas.

¿Cómo elegir el calzado más adecuado?

Al igual que ocurre con cualquier otra parte de un equipo de protección individual, es necesario tener a qué se expondrá el usuario en su lugar de trabajo antes de elegir el modelo adecuado.

Lo primero es tener en cuenta los riesgos a los que se expondrá: humedad, perforaciones, terrenos irregulares, posibles descargas eléctricas, aplastamientos… Una vez se tenga claro esto solo es necesario consultar las características de cada modelo para decidirse por el adecuado.

La importancia de la norma UNE EN ISO 20345:2012

De la misma forma que ocurre con otras prendas pertenecientes a equipos de protección individual, el calzado de seguridad debe estar sujeto a una normativa que garantice su eficiencia a los trabajadores que lo utilicen.

La norma UNE EN ISO 20345:2012 es la encargada de garantizar que el calzado de seguridad incorpora los elementos necesarios para proteger al trabajador de las posibles lesiones provocadas por accidentes.

De acuerdo a lo establecido por esta norma los calzados de seguridad S1P y S3 se consideran calzado de seguridad de categoría 1, dentro de los EPI de clase II  que son aquellos equipos de protección individual destinados a proteger contra riesgos de grado medio o elevado pero no de consecuencias mortales o irreversibles.