A nivel general, un guante de seguridad es una prenda de protección personal diseñada para proteger las manos de riesgos laborales, incluyendo cortes, abrasiones, quemaduras y exposición a productos químicos y otros peligros.

En el caso específico que nos ocupa en este post: los de protección térmica contra calor y fuego, están especialmente diseñados para proteger las manos de las altas temperaturas causadas por factores como la exposición a llama, el calor de contacto, el calor convectivo, el calor radiante, o las pequeñas y grandes salpicaduras de metal fundido. Los guantes de protección contra calor o fuego se clasifican en 4 niveles, que van de menor protección (1) a mayor protección (4).

Los guantes de protección térmica contra calor y fuego pertenecen a la categoría III de equipo de protección individual (EPI) cuando son diseñados para soportar temperaturas mayores a 100°C. De lo contrario, se clasifican como EPI de categoría II.

Estos guantes están hechos de materiales altamente resistentes al calor, como aluminios metálicos y telas aislantes, y pueden ser revestidos con materiales reflectantes para aumentar la protección. La mayoría de los guantes de protección térmica contra calor y fuego también tienen un forro interior suave y cómodo para un uso prolongado.

La norma EN-407

La norma EN 407 establece los métodos de ensayo, los requisitos generales y los niveles de rendimiento de los guantes de protección térmica. La norma incluye tanto los guantes térmicos como otros equipos de protección contra el calor o el fuego, como manguitos para el antebrazo.

El pictograma de la norma EN 407 se acompaña de 6 dígitos que identifican los niveles de rendimiento que un guante puede alcanzar en cada uno de los ensayos de la norma..

Cambios en la Norma EN 407:2020

• La norma anterior de 2004 solo incluía guantes térmicos, pero la actualización de 2020 también considera otros equipos de protección contra el calor o el fuego, como manguitos para el antebrazo.
• Además, se han introducido artículos para uso doméstico, como manoplas para horno.
• El rendimiento de la norma EN 407 no ha cambiado, pero sí se ha modificado el pictograma para diferenciar los guantes resistentes a las llamas de los que no lo son.

Características de los guantes térmicos incluidas en la Norma

• Inflamabilidad: se evalúa el guante al contacto con llama abierta durante 15 segundos. Si las costuras se rompen antes, el guante no pasa la prueba. El nivel de protección contra la llama se determina en función del tiempo de posinflamación (desaparición del fuego) y pérdida de incandescencia. La escala va desde 1 hasta 4.
• Resistencia al calor por contacto: se pone el guante en contacto con una fuente de calor de 100 ºC a 500 ºC, dependiendo del nivel de protección. El guante pasa la prueba si la temperatura interior no aumenta en más de 10 ºC en los primeros 15 segundos.
• Calor convectivo: se evalúa el tiempo de retardo en la transmisión de calor por el aire desde el exterior hasta el interior del guante. La revisión de 2020 cambió el método de ensayo, basándolo en EN ISO 9185:2007 en lugar de EN 373.
• Calor radiante: se expone el guante a un foco de radiación térmica y se mide el tiempo necesario para que la temperatura interior aumente en 24 ºC. El guante con mejor aislamiento contra el calor radiante obtiene el nivel 4.
• Salpicaduras de metal fundido: se funde una barra de metal sobre el guante térmico y se cuentan las gotas que caen hasta que la temperatura interior aumenta en 40 ºC. La máxima protección se obtiene con 35 gotas o más, sin que se fundan o agujereen las capas internas o externas del guante.

En qué actividades se pueden usar

Los guantes de protección térmica contra calor y fuego son ampliamente utilizados en una variedad de y actividades que implican el contacto con altas temperaturas. Hay que indicar que antes de utilizar estos guantes en situaciones de calor similares, hay que consultar la normativa y las situaciones específicas que soportan, ya que pueden ser adecuados para unas actividades y no para otras. Entre las actividades más comunes pueden estar:

• Químicas: manipulación de productos químicos peligrosos y sustancias inflamables.
• Metalúrgicas: soldadura, forjado, trabajos con laminadoras y hornos.
• Textiles: trabajo con máquinas térmicas.
• Restauración: manipulación de equipos de cocina y utensilios calientes.
• Emergencias: bomberos y trabajadores de rescate.
• Doméstica: algunos trabajos de bricolage pueden necesitar este uso de guantes ante herramientas con fuego o con alta temperatura.

Qué guantes de protección térmica son adecuados

En Intersafe disponemos de varios tipos de guantes de protección térmica frente al calor, fuego y metal fundido. Puedes encontrar una variedad según la actividad laboral donde se vayan a emplear, y/o el nivel de riesgo. Uno de lo ejemplos es el modelo de guantes de protección térmica ANSELL, cuyas aplicaciones van desde la manipulación de vidrio caliente, botellas y paneles, piezas fundidas de metal caliente, procesado, vulcanizado y calandrado de caucho, desmoldeo de neumáticos, correas y perfiles, o extracción de objetos esterilizados de autoclave.